VACACIONES DE FERRITINA EN VALDEGOVÍA

Después de escalar en el Picu, decidimos buscar un lugar cómodo, bonito y barato para disfrutar unos días. Y qué mejor que ir al País Vasco, a Valdegovía, donde algunas/os amigas/os nos esperaban con los brazos abiertos, o más bien hinchados de apretar en los talladitos de las tumbas.

(representación del Club d`Escalada Foradà)

Aunque inicialmente queríamos visitar diferentes zonas de Esukadi, Valdegovía nos atrapó, y allí creamos nuestra propia casa al aire libre. Se está de PM, in-creíble: buenas vías, buena temperatura, buen rollo… In-mejorable.

(la casa de Espejo)

Justo donde dormíamos, en un pueblo llamado Espejo, contábamos con todo tipo de servicios: piscina privada de aguas fluviales, la furgoneta del pan pasaba cada día a las 11:30 y nos despertaba con pan recién hecho, el frutero pasaba los jueves, y el pescatero los viernes, pero lo mejor ha sido la Kabaña, donde tenéis que ir si pasáis por allí. Un bar súper auténtico donde por las noches podíamos tomar unos quintos, jugar al futbolín o pegar unos bailes mientras escuchábamos canciones de Reincidentes, Barricada, Muchachito, los Suaves, Extremo o Fito, sin olvidar la canción estrella del verano, que ha sido “¡más chutes no!”… Ya os podéis imaginar lo bien que me lo he pasao.

(Lucía y Silvia en la Kabaña)

Y encima, aunque cuando hice las primeras vías no me lo podía imaginar, conseguí encadenar (en top rope, como siempre) un 6b+ en honor a mi compi (Yoli, del sector Valparaíso) y un 6c super guapo (Azquena Agian, del sector Kaparrak).